Neutralidad política en las FFCCSS.
A los que dicen que los Policías y Guardias Civiles tenemos que mostrar neutralidad política, os digo que sí, que es cierto; en el ejercicio de nuestras funcionesAllí somos absolutamente neutrales. Como el médico que atiende pacientes sin preguntar su signo político, así es.
Hemos atendido en rescates a gente absolutamente indeseable, de esa ideología que nos desprecia y durante años ha estado encantada del «tiro en la nunca». Han tenido nuestras ayuda, una manta y el mejor servicioY hemos denunciado y detenido a personas que se decían «amigos del Cuerpo».
Nos ha tocado detener a compañeros. Su pertenencia a un estamento policial no les ha servido para librarse de ello. La haces, la pagas. Hemos asistido a conflictos entre catalanes «indepes» y españoles muy españoles. Ha tenido razón el indepe y se la hemos dado. La ley es ley para todos.
En nuestro haber de actuaciones hay blancos, negros, musulmanes y cristianos, de izquierda y derecha. Homo y hetero, anti y pro España. Si han merecido premio, se lo han llevado. Si no, no. NUNCA hemos visto a un compañero actuar al arbitrio de la ideología ni lo hubieramos permitido.
En una unidad policial, aunque a alguno le cueste entenderlo, hay ideología, tendencias y opiniones de todos los colores. Se quedan en el vestuario y se sale a currar. También, entre nosotros, hay tensiones. Nos las guardamos para ofrecer el mejor servicio o, al menos, intentarlo.
Atendemos un accidente y no preguntamos -Oiga, ¿Le cae bien la policía? Se comete un delito y no miramos si lleva un pin de la bandera en la solapa. Si algo se ha demostrado, es que todas las operaciones contra la corrupción de TODOS los partidos, han sido cosa de G.Civil/Policía.
Ese policía local que le puso una denuncia en su parabrisas, no sabía quién es usted ni qué ideología tiene. Es el mismo que evitó el abuso a su hija ese día que usted desearía olvidar. El motorista que le sacó de aquel accidente es el mismo que le denunció en aquella alcoholemia.
El ertzaina al que llamas fascista porque detuvo a un amigo por quemar un contenedor, es el mismo que escolta la ambulancia en la que iba tu madre cuando le dio un infarto. El mosso que ha levantado a tu padre, anciano, caído en la calle, es el mismo al que insultaste el 1-O.
Yo, y miles como yo, aunque viéramos al mismísimo Otegui, Ternera o a algún otro sujeto despreciable como esos, en grave necesidad, iríamos en su auxilio. Hemos vivido situaciones así y es lo que nos diferencia. Puedo detestar ideas y a algunas personas, pero con mi uniforme, NO.
En este país opina todo el mundo, sabiendo y sin saber -Pareciera ser derecho constitucional-. Opinan ministros, jueces, fiscales, funcionarios; famosos varios…Sin embargo, los funcionarios policiales, aun como ciudadanos, también parecemos tener ese derecho vetado, otro más.
Algunos estamos por un sistema al servicio de la Ley y del ciudadano, no al servicio de las estructuras de poder político. Ser neutral no significa someterse a la bajeza. Se está a la justicia que dicten jueces y tribunales, no a la interpretación que el ejecutivo de turno haga.
Llevamos uniforme para uniformar conductas, olvidar ideas y cumplir nuestro deber. Lo hacemos a diario. Después de eso, aunque a alguno no guste, somos ciudadanos libres, y mientras vivamos en democracia opinaremos, fuera del ejercicio de nuestras funciones, lo que nos dé la gana.